miércoles, 9 de febrero de 2011

Conclusiones finales

     En muchos casos saber porque una persona se vuelve drogadicto es casi mas importante que enseñarle a salir de las drogas. Las drogas tienen con ellas distintos efectos; un efecto es el de 'Vacio', el de irte, el de 'Escapar Del Mundo', de tu realidad, de tu vida; otro efecto es el de enseñarte a conectarte mejor a 'Tu Realidad'; otro efecto es el de 'Exaltar Tu Realidad' las cosas que quieres hacer, digamos que sean mas intensas; otro efecto es 'Enseñame A Ser Yo' hay gente que bajo los efectos de la droga, puede ser ella misma porque es muy timida.
    La mariguana se ha considerado como una pseudodroga pero en realidad es una droga bastante fuerte. La mariguana tal y como se fuma aqui en Mexico que es la pura hierba no es tan adictiva, osea no es como en Europa que hacen el aceite de la hierba, el aceite es mucho mas concentrado, entonces es mucho mas adictivo. La mariguana acaba con tu deseo sexual, acaba matandote neuronas con lo cual es mas dificil tener memoria, la mariguana tiene efectos a largo plazo muy graves y sobre todo lo que hace es anular a el ser como persona, es decir, se busca un refugio en la mariguana que es la relajacion. El humano como ser pensante ante una situacion como esta se tiene que plantear "que es lo que me esta dando la mariguana que no me pueden dar otras cosas?",  en caso de que sea la relajacion buscar actividades que permitan relajarte.     Hay varios tipos de adicciones, estan las adicciones psicologicas, las adicciones a sustancias y luego a drogas, las drogas sencillas son sustancias que son mas faciles que te atrapen por sus componentes. Las adicciones a las drogas tales como la mariguana, la cocaina, la nicotina, el alcohol, la heroina y los farmacos.      Hay varios factores que influyen y te llevan a las drogas por ejemplo: en la universidad te dicen "ahh, tomate esta pastillita para no dormiry que te salga un examen increible", o "tomate esta pastillita para dormir"; muchas veces cuando nosotros queremos dormir es cuando tenemos un problema y cuando no podemos es cuando tenemos un problema que no nos deja dormir, en lugar de irnos al problema de base, lo que hacemos es tapar un problema con un farmaco. Entonces si no podemos dormir debemos de verificar que sentimos, es decir, si estas nervioso identificaar porque estas nervioso, por ejemplo, 'tengo demasiado trabajo', bueno pues en primer lugar resolver el problema pero no taparlo con algo que me va a hacer dormir; los FARMACOS son para DORMIR, los TRANQUILIZANTES solo los puede PRESCRIBIR UN MEDICO, sino se puede correr con muy malas consecuencias.     Muchos drogadictos se llegan a aprender la marca de los farmacos, la persona no es dueña de su cuerpo, ahora estas siendo controlado por las drogas, las anfetaminas, el 'speed' y todas sus derivaciones lo que hacen es que te dan energia, es decir, te dan una ganas de vivir, pues te suben los niveles de adrenalina y cuando tienes unos niveles de adrenalina, obviamente subidos de una manera artificial tienes ganas de todo, todo es bonito, todo es maravilloso... pero claro como es de una manera artificial en cuanto la dejas de tomar te da un 'bajon'; todo lo ves gris, todo lo ves triste, todo te preocupa, en otras palabras Evades La Realidad y no ves tu problema desde el fondo.     El Alcohol es una droga que todo mundo piensa que esta 'cool', por esta razon en Mexico la mayor parte de la poblacion llega a ser Alcoholico a muy temprana edad, es el camino posiblemente para que te acepten en un circulo de amigos, entonces por ejemplo, saliendo de la secundaria, en la fiesta de fin de año pues ya hay la bebida con un porcentaje minimo pero muy dañino de alcohol, y tu al querer quedar bien con tus amigos para que digan 'mira él tambien toma' entonces despues la preparatoria, la universidad, el trabajo se hacen los circulos y para que te acepten el alcohol juega un papel muy importante pues es una droga que se acepta, por ejemplo, se va a hacer una fiesta y lo primero que piensas es "y que van a dar de alcohol (ya sea cerveza, vino, champange, vodka, tequila, etc...). Este tipo de droga te puede llevar muy rapido al alcoholismo o puede ser muy paulatino a traves de los años,  pero si tu tomas un dia y al otro dia sientes la necesidad de "curartela" y te la "curas" y no solo eso sino que te sigues tienes que verdaderamente pensar si no tienes ya una dependencia al alcohol, cuando faltas al trabajo, cuando no haces las tareas, cuando eres indolente, cuando tienes problemas en tu familia por culpa del alcohol eres ya un adicto al alcohol...     Cuando sabes que tienes una adicciones cuando dejas de hacer cosas importantes para tu bienestar como asearte por estar en esta actividad que causa adiccion ya sea alcohol, mariguana, piedra, cigarro, speed, cocaina, nicotina, etc.     A las personas se le puede bombardear con muchisima informacion sobre "Di No a las Drogas" pero siempre debes de recordar que la ultima palabra la tienes TU y recuerda que hay algunas drogas como la heroina o la cocaina que con una o dos veces que la pruebes te puedes hacer adicto, y no solo adicto sino que te puede crear VIH (SIDA) porque no hayas limpiado la jeringa...Un drogadicto es un enfermo, es decir, necesita esa droga tanto que se vuelve el objeto de su vida y lo peor de todo es que puede llegar a matar por coseguir la droga.La parte clave de un drogadicto es reconocer que es drogadicto, a partir de que se reconoce como drogadicto ya se puede decir que se esta saliendo del agujero, ya toco fondo.La familia y los amigos no deben dejarse chantajear por el drogadicto, el drogadicto siempre dice "esta ya es la ultima", "yo te amo mucho, pero me he gastado todo el dinero", "dame dinero para algo"... aqui no vale el chantaje si se quiere a una persona que se quiere no se debe de dejar que la chantajeen pues el drogadicto se vuelve muy mañosos, lo unico que ahora mismo quiere es conseguir su droga.

RECUPERACION DE DROGADICCION

martes, 8 de febrero de 2011

Legalizacion/ilegalizacion de las drogas

Hay un supuesto que dice que si las drogas se legalizan, se acabaría con el narcotráfico y el problema de la adicción sería controlable.

La experiencia desmiente este supuesto. A excepción de Holanda, todos los países o estados que han experimentado esquemas de legalización o de despenalización han regresado a sus anteriores esquemas prohibicionistas. La causa: la epidemia de adicciones que han surgido como resultado de poner al alcance de todos sustancias que modifican ampliamente la conducta humana.
El doctor Rafael Velasco, ex presidente del Consejo Nacional Contra las Adicciones, clasifica a quienes proponen legalizar las drogas en: los que creen que acabaría con el narcotráfico, los que creen que las drogas no son tan malas, los que las han usado sin consecuencias graves, los que confían en soluciones simples para problemas complejos y los que apoyan la irrestricta "libertad" individual. Yo añado los que creen irreflexivamente en estos supuestos y claro, nunca faltan, los que se beneficiarían de la legalización.


Legalizar produce la ilusión de que los delitos se acaban. Y en efecto se acaban, pero de nombre. Ya no existiría el delito de narcotráfico, sencillamente porque la droga se hace llegar de manera legal, pero la adicción ahí estaría. Si se legalizara el homicidio, la tasa de homicidio bajaría a cero, porque ya no habría el delito de homicidio. Pero los muertos ahí estarían.
Un gobierno responsable tiene como finalidad principal proteger a sus ciudadanos. La función de protección en México está muy descuidada: el crimen prolifera, el graffiti daña las comunidades, los precios de la droga, muy cortada y adulterada, la pone al alcance de niños y jóvenes. Y quizá, para evitar esta sensación de falta de control, distintos grupos que deberían de proteger a la población han iniciado campañas que ahora con algo de silencio, y en otras con mayor insistencia, promueven la legalización de las drogas.

Los experimentos de legalizar o despenalizar han terminado por regresar a la prohibición: en 1975, la corte en Alaska aumentó la permisividad para poseer más mariguana. Para 1988, entre los jóvenes de 12 a 17 años, el consumo aumentó hasta alcanzar más del doble que el promedio nacional de Estados Unidos. Finalmente, en 1990, se volvió al antiguo esquema de prohibición y el consumo empezó a disminuir lentamente.
En Inglaterra, entre 1960 y 1970, los adictos a la heroína se multiplicaron por 30 y, durante los 80, el número creció cerca de 40 por ciento anual; ahora, arrepentida, enfrenta el enorme costo de tratar miles de adictos. En comparación, en todo ese tiempo el número de adictos a la heroína en Estados Unidos se mantuvo en cifras de alrededor de 500 mil usuarios.
En Suiza, un parque llamado Platzpitz, se definió como lugar de tolerancia para usar drogas. En 1987 tenía 300 visitantes permanentes. Para 1992, eran 20 mil. En 1992 tuvieron que cerrar el parque, como única forma de acabar con el lastimoso espectáculo de gente inyectándose y drogándose a toda hora.
Holanda es el único país que no ha dado marcha atrás a la despenalización del uso de las llamadas "drogas blandas", que no son tan blandas: cuando se despenalizó el uso de la mariguana, en 1976, su contenido de tetrahidrocanabinol – el ingrediente activo – era de 3 a 5 por ciento; actualmente es de 35 por ciento, cantidad que produce problemas notables de salud – pérdida de memoria, daños cognitivos, y una falta de energía crónica que convierte al usuario en un ser apático y pasivo –. Los resultados de la despenalización: el número de expendios de estas drogas aumentó, en 10 años, de 30 a mil 500 y el uso de mariguana en el grupo de edad de 18 a 25 años creció 200 por ciento. Al grado de que tan sólo en 1997, hubo un incremento de 25 por ciento en el número de adictos a la mariguana en tratamiento, comparado con un incremento de 3 por ciento en los casos de abuso de alcohol. De 1984 a 1996, el uso de drogas en adolescentes holandeses aumentó 200 por ciento, mientras que en Estados Unidos, en ese mismo periodo, la tasa se redujo en más del 50 por ciento. Las mismas autoridades atribuyen el 65 por ciento del aumento en el crimen juvenil al uso de estas drogas, y el uso de "drogas duras" como la heroína se ha triplicado desde la despenalización de la mariguana, pero Holanda no desea cambiar de rumbo. La frase holandesa que se usa para este fenómeno es alles door de vingers zien: ver a través de los dedos, esto es, ver sólo lo que quieren ver.
Los promotores de la legalización dicen que las drogas legales, alcohol y tabaco, matan mucha más gente que las drogas ilícitas, y es cierto. Pero no mencionan que eso es en un contexto de prohibición. Si se legalizaran, la mortalidad crecería enormemente. Estas sustancias alteran gravemente la conducta. Cerca del 70 por ciento de los presos en 12 áreas metropolitanas de Estados Unidos cometieron su delito bajo influencia de las drogas. Un tercio las había usado inmediatamente antes. El 28 por ciento de los homicidas y el 20 por ciento de los violadores cometieron sus delitos bajo influencia de drogas. En el 80 por ciento de los casos de maltrato infantil en que el niño murió, el agresor se encontraba bajo influencia del crack.
Es ingenuo pensar que un narcotraficante, que se ha dedicado al delito buena parte de su vida, se convertirá en un respetable hombre de negocios o que, al menos, dejará su actividad ilegal. Si todas las drogas no se legalizan absolutamente para todos con el mismo precio, el esquema fracasará. Si no se legalizan para los niños, o no se legalizan las mal llamadas drogas duras, entonces no faltarán delincuentes que se las vendan. Y el esquema, insisto, fracasará en ese caso en su faceta de inhibir al narcotráfico, porque la epidemia de adicciones y toda la mortalidad relacionada con la droga ahí estaría.
Durante mucho tiempo se han podido comprar, en nuestro país, marcas que antes sólo se conseguían de contrabando. Sin embargo, la gente sigue acudiendo a Tepito y otros mercados de contrabando, a comprar a menor precio aquello que fácilmente consigue cerca de su casa.
Tampoco parece prudente el usar el esquema de la fiscalización: hacer que los consumidores de drogas paguen impuestos en su consumo, como ocurre con el alcohol y el tabaco. Hacer a una economía dependiente de los impuestos generados por el consumo ciudadano de drogas que acaban con la iniciativa individual y alientan el comportamiento violento es francamente macabro.
 
Las drogas son sustancias que deben permanecer prohibidas, ya que si se aumenta su disponibilidad, más jóvenes y niños pueden caer en la adicción. La facilidad de obtener una droga está íntimamente relacionada con su nivel de uso, como quedó demostrado en el caso de Alaska arriba mencionado y muchos otros. Los programas de combate al narcotráfico y prevención de adicciones deben mejorar, claro está, pero legalizar produce la falsa sensación de control, que no sería sino otro engaño. Uno más, que un gobierno irresponsable podría propiciar.

"Barco a Venus" - Mecano

Dices que siempre estás viajando
pero me estas engañando
yo sé que tu estás sólo
y que no sales de tu cuarto.
Las luces de la calle
te hacen daño cuando sales
porque tu mundo es otro
mucho más oscuro.
Déjalo ya
sabes que nunca has ido
a Venus en un barco
quieres flotar
pero lo único que haces
es hundirte.
Sabes que pasas por la vida
sin salir de tu mentira
que muchos alimentan
y que crece día a día.
La mafia te persigue
y te coge la policía
te encierran y te sueltan
y todos te dicen.
Déjalo ya
sabes que nunca has ido
a Venus en un barco
quieres flotar
pero lo único que haces
es hundirte.
Esta cancion tarta ssobre algunos de los sintomas que tiene un individuo al estar bajo la influencia de las drogas.

Historia cronológica de las drogas

Un determinado problema social puede ser visto de maneras muy diferentes en distintos momentos.

En la Década del ’60 las drogas no eran consideradas como un "problema social", no era visto a diario. La sociedad decía " En nuestro país, esto no pasa" Se lo califica como un problema psiquiátrico-toxicológico, de carácter individual. 1968 – Ley 19.567 (1º de estupefacientes): Considera delito el tráfico de drogas pero no la tenencia para consumo personal. No existen campañas preventivas.

En la Década del ’70 en esta época se consumían drogas como expresión de oposición a la sociedad, el concepto droga se refería solo a los alucinógenos y a la marihuana. Sexo, droga, rock and roll era lo asociado con drogas. En los 70, quien consumía drogas era considerado como un peligro para la sociedad, como una persona que cuestiona el orden establecido. En la sociedad es calificado como un problema jurídico-penal, de carácter social y político. En 1974 – Ley 20.771: Penaliza tanto el tráfico de drogas como la tenencia para consumo personal. Las campañas refuerzan la autoridad de la familia y del estado:"Sabe usted donde esta su hijo?"

En la Década del ’80 la sociedad decía que el usuario de drogas era autodestructivo. Se consumían sustancias de producción farmacéutica(ansiolíticos, antitusivos, etc.) en esta época la sociedad dejaba de obviar las drogas y comenzaba a verlas como un problema social ya que aumentaban los usuarios de las drogas. De todas maneras la sociedad a quienes consumían drogas los veían como enfermos, pero no como traficantes o delincuentes. La sociedad comienza a ver a la drogadicción como un problema psico-social. En 1986 la Corte Suprema declara inconstitucional considerar delito la tenencia de drogas para consumo personal. Tras este acuerdo, las campañas informan sobre las sustancias, los síntomas y signos del consumo.

En la Década del ’90 por los años 90 la sociedad consideraba que la droga era muerte, ya para estas épocas, a diferencia de los 60, la drogadicción ocupa un lugar importante en la agenda publica. A quien consumía drogas se lo veía como culpable de promover el SIDA, y ya no era un problema psico-social, ni jurídico-penal, sino que es un problema medico-jurídico. En 1989 la Ley 23.737, aun vigente, considera delito el tráfico y la tenencia de drogas para consumo personal, pero en este último caso ofrece tratamiento como alternativa a la cárcel. Comienzan campañas tratando la peligrosidad de las drogas y la abstinencia de su consumo.

Drogas legales e ilegales

Legales:Son usadas por un alto porcentaje de la población.
     Las más frecuentes son: tabaco, alcohol, fármacos, químicos inhalables,
anabólicos y esteroides.


Ilegales: Son aquellas sustancias cuyo consumo está prohibido
por ley y pueden dividirse en tres grupos:


• Narcóticos: adormecen los sentidos al actuar sobre
el sistema nervioso central (como la marihuana y el opio). Una intoxicación
aguda causa vómitos y disminución de la agudeza sensorial.


• Estimulantes: la principal es la cocaína. Da
resistencia física, pero acelera el ritmo cardíaco, provoca parálisis muscular y
dificultades respiratorias que pueden desembocar en un coma respiratorio.

• Alucinógenos: el éxtasis es el más
consumido entre los jóvenes. Su peligrosidad radica principalmente en que puede
causar la muerte por deshidratación o paro respiratorio.


Drogas Duras y Drogas Blandas

     La diferencia entre una droga dura y una droga blanda es que aquella causa una adicción y/o una dependencia física y psíquica, mientras que una droga blanda solamente causa una sola adicción y/o dependencia, la cual puede ser a nivel psíquico solo o físico solo.
     En su origen esta distinción pretendió servir para distinguir las drogas altamente adictivas que comportan serios daños a la salud (duras), de las poco adictivas, que no presentan un riesgo grave para quien las consume (blandas).

A pesar de ello esta distinción es aún empleada tanto en el discurso oficial como en el habla informal:

            - Drogas duras: la cocaina, los opioides (morfina, heroina, etc.), el alcohol, o las anfetaminas son comunmente descritas como drogas duras.

            - Drogas blandas: el término es aplicado generalmente a los derivados del cannabis (marihuana, hachís, etc.), a la cafeína, etc. Por lo general el término se aplica a sustancias cuyo consumo no conlleva patrones de comportamiento social desadaptativos.

     La distinción entre drogas duras y blandas es importante en la política de drogas de los Países Bajos, entre otros estados, donde ciertas drogas blandas gozan de la tolerancia oficial, aunque casi siempre están sujetas a restricciones en cuanto a su comercio, producción y consumo.

DROGAS DURAS .-


DROGAS BLANDAS .-

Sindrome de abstinencia

     Es el conjunto de reacciones físicas o corporales que ocurren cuando una persona con adicción a una sustancia (alcohol o bebidas con etanol, tabaco u otras drogas) deja de consumirla.

Este síndrome también puede presentarse en algunas patologías psicológicas como la Dependencia Emocional, donde no se depende de una sustancia o droga, pero sí de afecto desmedido o dependencia hacia otra persona, presentando el individuo somatización (es decir, proceso por el cual se transforman o convierten problemas emotivos o psicológicos en dolores físicos)

Aunque los síntomas varían en forma e intensidad de acuerdo con el producto empleado y el tiempo que lleva desarrollándose la
dependencia, en todos los casos se deben a que se ha alterado el funcionamiento normal del sistema nervioso.

El síndrome de abstinencia es denominado coloquialmente mono.


- Causas
    En términos generales, las sustancias adictivas poseen compuestos semejantes a los
neurotransmisores (compuestos químicos empleados por las neuronas para comunicarse entre sí) encargados de desencadenar la actividad de los centros cerebrales de recompensa o placer, los cuales permiten la expresión de emociones gratificantes como entusiasmo, alegría y serenidad. Precisamente por ello hay quienes los utilizan para enfrentar momentos difíciles.

Pero, el uso frecuente de drogas, tabaco o alcohol exige cantidades cada vez mayores para lograr el mismo efecto; a este hecho se le conoce como tolerancia, y ocurre porque las sustancias adictivas sustituyen gradualmente la creación de neurotransmisores que desencadenan sensaciones de bienestar. En consecuencia, el paciente pierde la capacidad de experimentar gozo y tranquilidad de manera natural, y crea una dependencia o consumo compulsivo para no sufrir una serie de malestares como ansiedad, nerviosismo, alucinaciones, sudoración, temblores, escalofríos, dificultad para dormir, vómito y otros que, en conjunto, forman el síndrome de abstinencia.

Cabe destacar que el abuso de sustancias no siempre crea dependencia física, sino psicológica, la cual se basa en el deseo continuo de consumir un químico para hacer frente a situaciones que generan malestar. Aunque también es muy difícil de superar, tiene la peculiaridad de que cuando se deja de emplear la droga no se manifiestan cambios en el organismo, es decir, no hay síndrome de abstinencia, sólo alteraciones emocionales y de conducta.

El uso continuo de sustancias que actúan sobre el sistema nervioso es responsable de dependencia física, ya que el cuerpo se adapta a ellas y el cerebro experimenta un cambio en su estructura y desempeño, de manera que sólo puede funcionar normalmente ante la presencia de dichos químicos, sin olvidar que cada vez requiere mayores dosis para obtener efectos placenteros.

Es importante mencionar que cada sustancia actúa en forma particular en el cerebro y que no todas generan dependencia física ni síndrome de abstinencia. Para explicarlo mejor, podemos recurrir a una clasificación general de dichos químicos en tres grupos:
          
Depresores: Dosis pequeñas generan euforia, pero cuando son altas relajan la actividad del cerebro, produciendo aturdimiento y letargo, incluso la muerte al paralizar la actividad nerviosa que controla al aparato respiratorio. Muchos de estos químicos se utilizan con finalidades médicas, como tranquilizantes (narcóticos) o inductores del sueño (hipnóticos). Los más conocidos en esta clasificación son: alcohol, benzodiacepinas, fármacos calmantes, solventes y adhesivos; los tres primeros generan dependencia física y psicológica, los dos últimos sólo psicológica, según se ha comprobado hasta la fecha.
          
Estimulantes: Incrementan la actividad del sistema nervioso central. Suelen generar mejoría del estado de ánimo, sensación de felicidad, aparente aumento de la capacidad mental y física, falta de sueño y apetito, así como mayor actividad en general. Este grupo incluye anfetaminas, metanfetamina (speed), metilendioximetanfetamina (éxtasis o MDMA), fenciclidina (PCP o [[polvo de ángel]]), cocaína, nicotina, y cafeína; todas estas sustancias generan dependencia física y psicológica en distinto grado, además de síndrome de abstinencia.     

    Alucinógenos o psicodélicos: Producen la impresión de percibir imágenes o sonidos que no pueden captarse ordinariamente con los sentidos, y son empleados por algunas culturas en rituales. Producen aumento en la actividad de algunos centros cerebrales, dilatación de las pupilas, frío en brazos y piernas, y sensación de hormigueo en el estómago; así mismo, llegan a generar experiencias muy placenteras o terroríficas. En esta categoría encontramos: dietilamida del ácido lisérgico (LSD), marihuana, mescalina (peyote) y psilocibina; existe discusión acerca de su capacidad para generar dependencia psicológica, en tanto que la de tipo físico y el síndrome de abstinencia parecen estar por completo ausentes, salvo en sustancias específicas como la ketamina o la fenciclidina, cuya capacidad de provocar dependencia, tanto física como psicológica, está comprobada.

- Síntomas
     Los síntomas del síndrome de abstinencia siempre dependerán de la sustancia utilizada y del organismo de cada persona, ya que no siempre se tiene las mismas reacciones, en terminos genereales describimos a continuación los síntomas correspondientes a las adicciones más frecuentes:

- Alcohol.     
El síndrome de abstinencia en bebedores relativamente moderados comienza de 12 a 24 horas después de haber dejado de beber, y sus síntomas son: temblor, debilidad, escalofríos, dolor de cabeza, deshidratación y náuseas (idénticos a los de una cruda o resaca, pero de mayor duración e intensidad). También es común el deseo de volver a ingerir esta sustancia.

En grandes bebedores, además de lo anterior, puede producirse un evento más grave, llamado delírium tremens, que ocurre entre 2 y 10 días después de dejar de ingerir alcohol y que puede ser mortal. En principio, el paciente se muestra ansioso, desorientado, con pesadillas, sudoración excesiva, alteraciones en el tacto y depresión profunda; en ocasiones el pulso se acelera, hay fiebre, convulsiones (epilepsia alcohólica) y alucinaciones. También parece que el suelo se mueve, la cama gira o las paredes caen.

Si hay deficiencia de vitaminas llegan a presentarse, después del delirium tremens , el síndrome de Korsakoff, en el que se pierde la memoria de acontecimientos recientes, y encefalopatía de Wernicke, que genera movimientos anormales de ojos y extremidades, confusión y cambios de carácter.

- Nicotina 
    Por regla general, cuanto más tiempo y más cigarrillos haya fumado una persona, mucho mayor será la probabilidad de que presente síntomas al abandonar el consumo de tabaco; los más comunes son: deseo irrefrenable de fumar, tensión, irritabilidad, dolor de cabeza, dificultad para concentrarse, somnolencia o insomnio y aumento del apetito y de peso.

- Narcóticos.
     Morfina,opio y heroína, además de sustancias farmacológicas como oxicodona y codeína integran este grupo de depresores del sistema nervioso. La reacción del organismo ante la abstinencia suele ser, en principio, respiración agitada acompañada de bostezos, lagrimeo, flujo nasal y sudoración; luego se presentan hiperactividad, sentido de alerta exacerbado, incremento del ritmo cardiaco, piloerección ("piel de gallina") y fiebre. Otras manifestaciones son pupilas dilatadas, temblores, escalofríos, dolor muscular, inapetencia, dolor abdominal y diarrea.

- Ansiolíticos e hipnóticos.
      Son fármacos depresores de la actividad nerviosa, como
benzodiacepinas, barbitúricos, glutetimida, cloralhidrato y meprobamato que se prescriben con receta médica para controlar la ansiedad o inducir el sueño, pero que al tomarse en altas dosis o por periodos prolongados generan adicción. Al interrumpir su consumo cuando hay dependencia se desencadena una reacción grave, aterrorizante y potencialmente mortal, muy parecida al delirium tremens , cuyos síntomas principales son debilidad, malestar general, depresión, temblores, deshidratación, delirio, insomnio y alucinaciones.

- Anfetaminas.
     La adicción a estos estimulantes del sistema nervioso suele iniciar cuando se administran como medicamentos para bajar de peso, aunque la
metanfetamina y el MDMA o éxtasis han alcanzado amplia difusión en el mercado ilegal. Cuando se interrumpe bruscamente su consumo se generan cansancio y somnolencia extremas, si bien algunas personas se muestran intensamente ansiosas e inquietas. Los consumidores que estaban deprimidos al comenzar a usar las anfetaminas pueden incrementar su malestar cuando las dejan, al grado de que adoptan tendencias suicidas. También experimentan delirios y alucinaciones.

- Cocaína.
     Es otro estimulante del sistema nervioso, sólo que más potente; puede inhalarse o inyectarse, y cuando se hierve con bicarbonato sódico se obtiene el crack , que puede ser fumado. La tolerancia se desarrolla rápidamente y las reacciones de abstinencia incluyen cansancio extremo, depresión y ansia de suicidio; en ocasiones hay alucinaciones.

- Polvo de ángel o fenciclidina.     Fue desarrollado a mediados del siglo XX como anestésico, pero se suspendió su uso porque los pacientes presentaban ansiedad, delirios y cuadros de psicosis temporal (alteraciones profundas de la realidad y de la percepción sensorial); sin embargo, comenzó a sintetizarse en laboratorios clandestinos para su uso como estimulante. Su abstinencia genera depresión, ansia de consumir drogas, fatiga, dificultades para dormir o dormir mucho, aumento del apetito y de peso, movimientos lentos o súbitos y sueños vívidos desagradables. El carácter suele volverse violento y suicida.

- Marihuana.
     Es un depresor del sistema nervioso, fumada o comida genera dependencia psicológica, las reacciones de abstinencia cuando se es consumidor crónico van de perdida de sueño, apetito, además de frio y sudor en las manos. Por lo general se presenta una perdida de peso en la persona.

*Síndrome de abstinencia neonatal
     Cuando una mujer embarazada es adicta, las sustancias que consume llegan al torrente sanguíneo del
feto a través de la placenta. Al nacer, la dependencia del bebé respecto a la droga continúa, pero no su administración, por lo que padece diversos trastornos en su sistema nervioso y en su organismo en general.

Abstinencia en recién nacidos. Además de las dificultades específicas del síndrome, de acuerdo con la sustancia empleada por la madre, un bebé puede presentar otros problemas:


            Crecimiento deficiente.

            Nacimiento prematuro.

            Convulsiones.

            Defectos congénitos.

            Llanto excesivo y muy fuerte.

            Mala alimentación; pobre succión de leche materna.

            Muertes prematuras.

Diagnóstico
Por lo general se basa en

            - Observación de los síntomas antes descritos.

            - Historia clínica, en la mayoría de las veces con ayuda de familiares o personas cercanas.

            - Revisión física realizada por un médico general, adictólogo o, en ocasiones, por un especialista en urgencias.

            - En algunos casos se requieren exámenes de toxicológica (detección de drogas) para     descubrir la presencia de numerosas sustancias en el organismo. Dichos estudios pueden efectuarse con pruebas de orina (los más frecuentes) o de sangre (de mayor precisión).

Prevención
         - Es de gran utilidad la realización de campañas informativas que avisen a la población sobre los riesgos de consumir drogas.

             -  Debido a lo anterior, es importante que los padres se informen sobre el tema y transmitan sus conocimientos a sus hijos.

              - Mucha gente se inicia en el uso de drogas porque no sabe cómo enfrentar situaciones adversas o de mucha tensión, por lo que , se debe procurar buena comunicación en casa y ayudar a que cada miembro de la familia cuente con alta autoestima y autoconfianza.

              - Evitar la tendencia social que hace pensar que tabaco y alcohol son sustancias festivas que favorecen la convivencia humana.
              - La práctica de actividades deportivas o artísticas contribuye al manejo constructivo de las emociones, por lo que también es muy conveniente.
              - El uso de medicamentos ansiolíticos o hipnóticos debe realizarse bajo estricta prescripción médica. Nunca se deben utilizar dosis más altas o por tiempo mayor al indicado.

Tratamiento
     La terapia de rehabilitación contra las adicciones tiene entre sus principales objetivos ayudar a superar el síndrome de abstinencia. Nuevamente, en cada caso se debe considerar cuál es la sustancia empleada por el paciente, ya que de ello dependerán las medidas a seguir:
Alcohol .- Una de las primeras complicaciones en ser tratadas es la deficiencia nutricional, por lo que es común la administración de complejos vitamínicos ricos en vitamina C y tiamina (B1); también se combate la deshidratación con soluciones intravenosas de magnesio y glucosa. Por otra parte, se suele prescribir un fármaco benzodiacepínico durante algunos días para calmar la agitación, y en caso de que el paciente sufra alucinaciones se darán antipsicóticos. Todas estas medidas son más agresivas en caso de delirium tremens, aunque también se requiere el empleo de analgésicos que ayuden a fiebre y dolores de cabeza.

Una vez que se ha superado la fase crítica del problema, se requiere la supresión del alcohol por completo. Debido a que es prácticamente imposible que el paciente lo logre por cuenta propia, es necesario que cuente con ayuda psicológica y apoyo de sus familiares, sin olvidar la importancia de recibir asesoría individual por parte del médico (a veces prescribirá algunos medicamentos que le ayuden a prevenir recaídas, sin olvidar que probablemente requerirá atención especial debido a problemas hepáticos o en los riñones). Es de mucha utilidad que se integre a terapias grupales como las que brinda Alcohólicos Anónimos.

Nicotina .- Se han desarrollado diversas estrategias de terapia, aunque para que cumplan con el objetivo de superar definitivamente el síndrome de abstinencia y dejar de fumar es conveniente que se utilicen bajo prescripción médica. En casos moderados es ideal recurrir a suplementos de nicotina en forma de goma de mascar o parches, y en casos más severos fármacos como clonidina (ayuda a regular la
presión sanguínea), fluoxetina y buspirona (antidepresivos).

También son importantes el apoyo emocional y la terapia psicológica para superar la dependencia a la nicotina, por lo que es altamente recomendable acudir a una clínica antitabaco, donde se brinda tratamiento integral al paciente, siempre de acuerdo con sus características.

Narcóticos .-       La sustitución de estas sustancias por metadona es el principal procedimiento para superar la abstinencia; de hecho, este fármaco es también un narcótico, pero genera alteraciones menores, se toma con menos frecuencia y puede disminuirse la dosis poco a poco. Asimismo, la naltrexona es útil para la recuperación en caso de dependencia a la heroína, ya que bloquea los efectos de esta droga incluso en dosis intravenosas importantes. Los grupos de ayuda o la terapia psicológica son también de gran utilidad.

Ansiolóticos e hipnóticos .-        Incluso aplicando el mejor tratamiento, una persona puede tardar un mes o más en sentirse normal. Frecuentemente, los médicos tratan la abstinencia volviendo a administrar el fármaco causante, sólo que en dosis inferior y disminuyéndola progresivamente a lo largo de días o semanas.

Anfetaminas .-       Un consumidor crónico llega a necesitar de hospitalización durante la abstinencia. Si sufre delirios y alucinaciones puede recibir un fármaco antipsicótico, como clorpomacina, que tiene efecto calmante y alivia el sufrimiento, aunque puede reducir la presión arterial en forma considerable. Asimismo, un ambiente tranquilizante y seguro ayuda a la persona a recuperarse.

Cocaína .-       El tratamiento exige supervisión de cerca porque la persona puede volverse depresiva y suicida; por ello, muchas veces se recomienda su ingreso a un hospital o centro de rehabilitación. El método más eficaz consiste en combinar asesoramiento médico y psicoterapia personalizada o en grupo, además de que en caso de que se presenten depresión o trastorno bipolar se deben administrar antidepresivos o litio, respectivamente.

Polvo de ángel o fenciclidina .-      Las medidas a tomar dependen de los síntomas específicos: se administran fármacos para bajar la presión arterial elevada o para frenar las convulsiones; cuando el paciente se agita, se le instala en una habitación tranquila para que se relaje, aunque se le debe supervisar a menudo la presión sanguínea, respiración y ritmo cardiaco. No ayuda hablarle de manera calmada, ya que esto puede agitarle todavía más. En caso que la intranquilidad permanezca, se dará un medicamento como diazepam. Superada la crisis se requiere tratamiento psicológico y probablemente algún antidepresivo.

Abstinencia en recién nacidos .-      Los bebés con este problema son irritables y es difícil consolarlos, por lo que envolverlos en una manta durante estos episodios puede ayudar. Además, pueden requerir calorías adicionales debido a su mayor actividad, de modo que se les proporcionan fórmulas lácteas que cubran sus exigencias. En caso de vómito o diarrea, se administran líquidos por vía intravenosa para evitar deshidratación.

     Se pueden recetar medicamentos para tratar síntomas severos, como metadona y benzodiacepinas, especialmente las convulsiones. También es común que se utilice la misma sustancia a la que fue expuesto el recién nacido, y una vez que se controlan los síntomas del síndrome de abstinencia, se reduce gradualmente la dosis.